martes, 23 de septiembre de 2014

El paisaje natural colombiano es heterogéneo ya que presenta irregularidades y variaciones en su superficie: montañas, macizos, serranías, depresiones y llanuras. El clima también aporta el toque de diferencia paisajística. Las playas, los valles, los nevados, los desiertos y sabanas también tienen relevancia frente al paisaje.
Un valle es una depresión de la superficie terrestre que, generalmente, se halla ocupada por ríos, ciénagas y pantanos. En Colombia existen estos tipos:
 Valles transversales. Son los que atraviesan la Cordillera y están regidos por la dinámica de los ríos que nacen y la cruzan.
 Valles longitudinales. Corren en la misma dirección que la Cordillera y tienen relevancia por su amplitud y por la red hídrica que los conforma.
 Valle del Río Magdalena (200.000 km2). Está localizado entre las Cordilleras Central y Oriental. Nace en el sur del Huila, y desemboca Bocas de Ceniza en el mar Caribe; en su recorrido se topa con gran diversidad de climas y vegetación como praderas, estepas, selvas, ciénagas y pantanos.
 Valle del Río Cauca (aprox. 85.000 km2). Separa las Cordilleras Occidental y Central. La parte media de este valle representa una de regiones más fértiles del país. Recorre de sur a norte regiones de praderas, de ricos cultivos, de escasa fertilidad y zonas de lagos en sus partes alta, media, en el Cañón del Cauca y en la desembocadura del río en el Magdalena.
 Valle del Río Atrato (35.000 km2). Ubicado entre la Cordillera Occidental y la Serranía del Pacífico. Es, al igual que el Valle del río San Juan, húmedo, ardiente y selvático. 
Otros valles que podemos mencionar son el Valle del Sinú, el Valle del Patía, el Valle de San Juan, el Valle de San Jorge, el Valle del Cesar, el Valle de Ranchería y el Valle de Zulia





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